¿Por qué mi gatito no deja de estornudar?

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Gatito atigrado en brazos de su joven propietaria junto a una ventana. El gatito presta atención a algo o alguien desde la ventana.

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Los estornudos permiten a gatos, gatitos, humanos y prácticamente cualquier mamífero expulsar sustancias que no necesitan a través de la nariz. El interior de la nariz es muy sensible, y actúa como filtro para evitar la entrada de sustancias potencialmente peligrosas en la tráquea y los pulmones. Como ocurre con muchas cosas en la vida, estornudar es bueno con moderación. Sin embargo, en algunos casos el exceso de estornudos puede ser un signo de mala salud u otros problemas, como la existencia de cuerpos extraños que obstruyen la nariz. Veamos las principales causas del estornudo y cuándo se debe buscar ayuda.

¿Qué hace estornudar a mi gatito?

Los gatos tienen un olfato increíblemente sensible y lo utilizan mucho más que los humanos. El sentido del olfato de los gatos también está muy relacionado con el apetito. A los gatitos les encanta explorar, y olfatean constantemente su entorno y todos los recovecos en los que pueden meterse. Por ello, hay muchas cosas que pueden hacerles estornudar, como las siguientes:

  • Polvo. Por muy limpia que esté tu casa, los gatitos encontrarán lugares en los que habrá polvo.

  • Arena para gatos. Algunas marcas de arena para gatos son muy polvorientas, y esto puede resultar bastante molesto para su pequeña y sensible nariz.

  • Perfumes, velas perfumadas y productos de limpieza. Los olores que nos resultan agradables y utilizamos a diario pueden ser demasiado intensos para animales tan sensibles al olfato como los gatitos. Intenta evitar los olores fuertes siempre que sea posible.

  • Humo de cigarrillos. El tabaquismo pasivo es tan perjudicial para nuestras mascotas como para las personas que nos rodean. No debes fumar cerca de tus mascotas.

     

  • Polen y moho.

  • Cuerpos extraños. La nariz de los gatos, y sobre todo la de los gatitos, es muy pequeña, pero aun así puede obstruirse. Las briznas de hierba se suelen inhalar o ingerir accidentalmente al explorar el jardín, algo que los gatos hacen ocasionalmente. Esto es muy irritante, y suele provocar estornudos repentinos y frecuentes. Tu gatito también puede darse zarpazos en la cara o sacudir la cabeza.

Además de los agentes físicos que pueden irritar la nariz, la irritación también puede deberse a causas médicas:

  • Infecciones víricas. En las primeras etapas de su vida, los gatitos dependen de la inmunidad de sus madres. Si no están vacunadas, los gatitos pueden ser vulnerables a las infecciones. Además, los gatitos suelen proceder de establecimientos de cría o protectoras en las que conviven varios gatos, por lo que pueden estar expuestos a más enfermedades o a una mayor carga viral.

  • Infecciones bacterianas como la clamidia.

  • La existencia de tumores en la nariz de los gatitos es poco frecuente, pero puede causar estornudos.

¿Cuándo hay que preocuparse?

Como hemos dicho, estornudar puede ser algo muy bueno. Se trata de una función corporal completamente normal, por lo que los estornudos ocasionales no deben preocuparte. Si son frecuentes, quizás puedan evitarse, ya que podrían deberse al olor intenso de determinados productos o el uso del arenero. Seguramente puedas eliminar la fuente de irritación con bastante facilidad.

Sin embargo, si tu gatito se encuentra mal, y sobre todo si deja de comer, puede enfermar y debilitarse muy rápidamente debido a su tamaño. Si además de estornudar tu mascota presenta alguno de los siguientes síntomas, debes ir al veterinario:

  • Deja de comer o come menos de lo normal.

  • Se deprime y no quiere jugar.

  • Tiene los ojos hinchados o rojos.

  • Presenta alguna secreción ocular o nasal.

  • Se rasca la cara o sacude la cabeza.

  • Estornuda todo el tiempo o sufre episodios frecuentes.

  • Tiene mal aspecto.

  • Tose.

  • Tiene otros problemas, como diarrea.

Habla con tu veterinario acerca de las vacunas, la atención sanitaria preventiva y una buena alimentación, y lleva a tu gatito a las revisiones que te recomiende. De este modo, podrás asegurarte de que crezca bien y sea feliz además de estar sano.

Revisado por el Dr. Hein Meyer (doctor en Medicina Veterinaria, doctorado, diploma ECVIM-CA)