¿Por qué mi gato no come? Te contamos lo que puedes hacer al respecto

¿Te preocupa que tu gato no coma? En ocasiones, puede resultar difícil distinguir entre un periodo en el que tu gato esta siendo simplemente quisquilloso y un problema de salud grave. Es normal que un cambio en la rutina de tu gato te preocupe, pero averiguar la causa es el primer paso para que vuelva a comer de manera habitual.

¿Por qué mi gato no come?

Seamos sinceros, a tu gato le encanta comer. Está en la lista de sus actividades favoritas, junto con dormir, jugar e intentar llamar la atención de sus propietarios. Pero, además, la alimentación es también un elemento básico de supervivencia, sin el cual la salud de tu gato puede empeorar rápidamente.

Cambios en la alimentación

Los gatos son animales de costumbres y suelen resistirse a los cambios, especialmente en sus hábitos de alimentación. ¿Has cambiado recientemente la alimentación de tu gato? Tal vez, simplemente se esté negando a probar un nuevo sabor. Los gatos pueden tardar un tiempo en aceptar nuevos alimentos, por lo que generalmente se recomienda una transición lenta. Tu gato no puede estar demasiado tiempo sin comer, así que si no come durante 24 horas, incluso después de ofrecerle su alimento anterior, es hora de considerar otras razones que expliquen su falta de apetito.

Estrés ambiental

Puede que tu gato se empeñe en no comer si no está contento con el entorno. Según la protectora para perros y gatos Battersea, los gatos son criaturas muy sensibles y la falta de apetito puede ser una señal de que tu gato está estresado. Entre las posibles causas se incluyen:

• Un gran cambio, como una nueva casa, un bebé o una nueva mascota.

• Una interrupción en la rutina habitual del gato.

• Invitados, personas desconocidas o ruido excesivo en el hogar.

Si sabes que este tipo de cosas suelen estresar a tu gato, consulta con el veterinario para aprender formas de que tu gato se relaje.

Posible enfermedad

Los problemas digestivos, como el estreñimiento, la colitis y la enfermedad inflamatoria intestinal (o enteropatía crónica), son estresantes para el organismo de tu gato, y suelen provocar pérdida de apetito, gases, vómitos y diarrea. Otros problemas que pueden provocar una reducción del apetito son las enfermedades renales y los problemas dentales. El PDSA explica que algunos problemas como las enfermedades en las encías son dolorosos y pueden quitarles las ganas de comer a los gatos, así que asegúrate de que tu veterinario incluya un examen dental completo en cada revisión.

Solamente el veterinario puede diagnosticar una enfermedad, así que ponte en contacto con la consulta de inmediato ante cualquier cambio de salud inusual o significativo. Asimismo, deberías organizar una revisión dental para tu gato si rechaza los alimentos secos o tiende a masticar en un único lado de la boca.

Cómo hacer que tu gato coma

Si tu gato desprecia las comidas, intenta ampliar sus opciones, explorando nuevas combinaciones de sabores u ofreciéndole el alimento de una forma diferente. Cuando le des a probar nuevos alimentos, hazlo gradualmente para que tu gato se acostumbre a los nuevos sabores y texturas. Si tu gato se muestra reacio a probar un nuevo alimento, puedes probar a añadirle una pequeña cantidad de caldo al alimento seco o calentar la comida en lata.

International Cat Care desaconseja forzar al gato a comer o alimentarlo con una jeringa, ya que esto puede crear una asociación negativa con la alimentación y empeorar sus problemas de apetito. En su lugar, ofrece una gran cantidad de ideas para animar a tu gato a comer.

Si se estresa con facilidad, es importante que te plantees preparar a tu gato para los eventos en casa y planificar con antelación la presentación de una nueva mascota, ya que esto le ayudará a aceptar mejor los cambios en su estilo de vida.

Además de lo que tu gato come, debes tener en cuenta dónde lo hace. En su «Código de prácticas para el bienestar de los gatos», el Canine & Feline Sector Group del Gobierno de Reino Unido advierte que los gatos no suelen comer si el alimento está demasiado cerca del arenero. También deberías intentar colocar el comedero lejos de otros animales, en una zona limpia y tranquila con poco movimiento. Incluso los cambios aparentemente menores pueden estresar a tu gato, así que es una buena idea crear zonas específicas para su alimentación en tu casa.

¿Cuándo debería llamar al veterinario?

Esta es una buena regla para cualquier amante de las mascotas: en caso de duda, llama al veterinario.

El veterinario comparte tu objetivo de mantener a tu querida mascota en plena forma y siempre es mejor pecar de prudente. Ponte en contacto con el veterinario en cuanto notes un cambio, ya sea repentino o gradual, en el comportamiento de tu gato. Es importante que te preguntes por qué tu gato no come, especialmente si ha pasado más de un día desde la última vez. Si tu gato necesita tratamiento, cuanto antes lo reciba, mejor.

Ahora que conoces algunas de las causas que pueden explicar la pérdida de apetito de tu gato y cómo hacer que vuelva a comer de manera habitual, puedes adoptar un papel activo para ayudar a tu gato a retomar el buen camino hacia una vida sana y completa.