Cómo saber si tu perro está mal del estómago y cómo tratarlo

Todo el mundo sabe que los perros son bastante propensos a comer cosas que no deberían. A veces, esto puede provocar malestar digestivo, vómitos y quizá diarrea. Si tu perro está sano, no deberás preocuparte en caso de que sufra un dolor de estómago ocasional. Sin embargo, si tiene problemas gastrointestinales graves o frecuentes, debes ir al veterinario. El vómito puede provocar una deshidratación rápidamente, como también pueden hacerlo las heces acuosas a largo plazo. Más vale prevenir que curar. Si alguna vez te preocupa un trastorno digestivo, pide consejo a tu veterinario.

Signos de que tu perro está mal del estómago

¿Cómo puedes saber si tu perro se encuentra mal del estómago? Muchos de los síntomas son similares a los que experimentamos los humanos cuando nos duele la tripa. Según Experto Animal, entre los síntomas de la gastroenteritis se incluyen:

• Diarrea, incluyendo heces de diversos colores, como verde o amarillo.
• Vómitos o náuseas.
• Falta de apetito.
• Cansancio o apatía.
• Fiebre.
• Dolor abdominal.

Experto Animal añade que tu perro podrá indicar que le duele el abdomen por medio de aullidos o gruñidos cuando lo coges en brazos o le tocas la barriga. Además, es posible que el perro adopte la «posición de rezo», es decir, con las patas delanteras estiradas sobre el suelo, de pie sobre las traseras y con la cola levantada. Es la misma postura que adoptan a veces los perros cuando juegan.

Las causas de los problemas de estómago pueden ser internas (se producen dentro del estómago) o externas (se producen fuera del estómago). Entre las causas internas del malestar digestivo se incluyen las indiscreciones (es decir, que ha comido algo que no debería) o las alergias alimentarias, los empachos, los parásitos, las obstrucciones intestinales, las úlceras o los tumores. Entre las causas externas se pueden incluir dolor, golpes de calor, estrés, problemas en el hígado o el riñón, pancreatitis, problemas hormonales, trastornos cerebrales, problemas en el oído interno o cáncer.

Cómo saber si su perro tiene un estómago sensible o un malestar.

Algunos perros tienen un estómago de acero y pueden comer cualquier cosa sin que les siente mal. Sin embargo, otros perros vomitarán al comer algo que difiera ligeramente de su alimentación habitual.

La forma más fácil de saber si tiene el estómago delicado es por la frecuencia de los signos. Si tu perro experimenta cualquiera de los signos de malestar digestivo frecuentemente (una vez al mes o más), es posible que tenga el estómago delicado.

No siempre es fácil identificar las causas que producen un malestar digestivo crónico, pero estas van desde la intolerancia y la alergia a determinados alimentos, hasta cambios en la flora bacteriana del sistema digestivo, conocida como microbioma intestinal.

Entre los síntomas de una alergia alimentaria, además de los ya mencionados, se pueden incluir problemas cutáneos, como zonas irritadas o pérdida de pelo, y un aumento de los ruidos en la tripa.

Qué se le debe dar a un perro con el estómago delicado

La manera de tratar el malestar digestivo de tu perro dependerá de la gravedad y la causa subyacente. Por ejemplo, si la causa es una pancreatitis, el tratamiento necesario será diferente al que se recomienda en caso de alergia alimentaria. Por otro lado, si tu perro sufre un malestar digestivo leve lo más seguro es que no necesite ningún tratamiento. Experto Animal nos recomienda consultar al veterinario para asegurarnos, especialmente si se trata de un perro joven o si parece que los síntomas empeoran con rapidez.

Los veterinarios cuentan con múltiples opciones para ayudar a nuestra mascota cuando se encuentra mal del estómago. Dependiendo de lo que esté sufriendo tu perro, los tratamientos pueden ser medicamentos antieméticos o astringentes, antiácidos, inyecciones intravenosas o subcutáneas, o tratamientos desparasitarios. Algunos perros pueden precisar una hospitalización o una intervención quirúrgica.

La alimentación adecuada puede ayudar

Algo esencial para aliviar las molestias en el estómago es alimentar a tu perro de la manera adecuada. La forma más fiable de calmar un malestar estomacal es pedir al veterinario un alimento de fácil digestión para dárselo durante unos días. La elección de estos alimentos, que le proporcionan a tu perro todos los nutrientes que necesita, puede ser personalizada por el veterinario en función de la gravedad. Una vez que todo se haya asentado, puedes introducir de nuevo el alimento habitual en un par de días.

Por suerte, existen múltiples opciones disponibles para que los perros con malestar digestivo se recuperen pronto. Junto con tu equipo veterinario, puedes ayudar a tu perro a superar un dolor de estómago y recuperar su alegría en un abrir y cerrar de ojos.