¿Qué significa el comportamiento de mi cachorro?

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Encuentre alimentos que se ajusten a las necesidades de su mascota

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Al mismo tiempo que los cachorros aprenden a caminar y a jugar y que copian la manera de comportarse de otros cachorros, están aprendiendo también a hablar. Si bien los cachorros y los perros no usan palabras, sí que comunican sus pensamientos y sentimientos a través de su lenguaje corporal y de otras conductas expresivas. Comprender el lenguaje corporal de tu cachorro te permitirá comunicarte con él más fácilmente.

Cómo interpretar el lenguaje corporal de tu cachorro

Es posible que las expresiones faciales de tu cachorro te hagan reír o te den ganas de achucharle, pero su expresividad va más allá del aspecto de su carita peluda. Según The Spruce Pets, los cachorros usan todo su cuerpo para comunicarse, desde los ojos a la cola.

Ojos: Entrecerrar los ojos o tener los párpados caídos indica felicidad o placer, especialmente durante una actividad placentera, como al acariciarles. Los ojos muy abiertos muestran un estado de alerta. Desviar la mirada y evitar el contacto visual señalan sumisión o estrés, mientras que mantener la mirada es señal de desafío y de que tu cachorro quiere afirmar su dominancia. Préstale mucha atención también a las pupilas. Las pupilas de un cachorro agresivo se dilatan cuando están a punto de atacar.

Oídos: Si bien el tamaño y la forma de las orejas pueden influir en la facilidad de ver y de comprender el lenguaje que expresan, las orejas de los cachorros en un gran estado de alerta están erectas y apuntan hacia adelante. Si tiene las orejas planas apuntando a la parte posterior de la cabeza es señal de miedo o sumisión.

Boca: La boca parcialmente abierta con la lengua colgando indica que el cachorro está contento y relajado. Lamer o sacudir la lengua como si estuvieran lamiendo algo expresa apaciguamiento. Un cachorro que atrapa o mordisquea el hocico de otro perro o su bozal está intentando afirmar su dominancia. Estos gestos son bastante fáciles de interpretar, pero lo que no está tan claro es cuando el cachorro muestra los dientes. Los labios estirados hacia arriba para mostrar los caninos es señal de dominancia y agresividad, mientras que los labios separados en una sonrisa amistosa son señal de sumisión.

Postura: La manera en la que tu cachorro se mueve lo dice todo. Los perros seguros de sí mismos, y aquellos que afirman su dominancia, caminan con la cabeza alta y se mantienen erguidos. Otras posturas dominantes son: embestir, empujar, inclinarse e imponerse a otros perros o personas. Los cachorros que se sienten menos seguros de sí mismos intentarán aparentar ser más pequeños agachando las orejas y la cabeza y metiendo la cola entre las piernas. Sostener una pata en alto a modo conciliatorio y darse la vuelta para exponer la barriga también son signos de sumisión o de comodidad contigo.

Pelo: Hasta el pelo de tu cachorro puede indicarte su estado de ánimo. Tanto si está asustado como si está agresivo, un perro en un gran estado de alerta tendrá el pelo erizado (es decir, el pelo de punta a lo largo de la columna).

Cola: Uno podría pensar que mover la cola indica felicidad y simpatía. Pero, dependiendo de otros tipos de lenguaje corporal, de hecho puede indicar otros estados de ánimo, según The Spruce Pets. Si el cachorro está meneando su trasero o todo el cuerpo, sí que quiere decir que está entusiasmado y feliz de verte. Sin embargo, mover la cola lentamente puede expresar incertidumbre e indecisión, mientras que mantenerla en alto y menearla rápidamente en un arco estrecho indica miedo o agresividad.

Evolución de la conducta del cachorro a medida que crece

Ciertos tipos de conductas están correlacionadas también con la fase de desarrollo en la que se encuentra el cachorro.

Dentición: En torno a las tres semanas de edad, cuando los cachorros dentellean y mordisquean es señal de que les están creciendo los dientes de leche. Entre los tres y los seis meses de edad, mordisquear y masticar intensamente, junto con una mayor agresividad, significa que van a salirles los dientes adultos, según Cuteness. Este es un buen momento para comprarle a tu cachorro un mordedor y colocar los zapatos y demás objetos valiosos fuera de su alcance.

Socialización: En torno a las cuatro semanas de edad, los cachorros muestran valentía y curiosidad, aventurándose más lejos de su madre y de otras crías de la camada para explorar. Este es un buen momento para que socialicen, exponiéndoles a nuevas personas, animales domésticos y experiencias.

Adolescencia: En torno a las 12 semanas de edad, es de esperar que tu cachorro intente afirmar su dominancia y desafiar los límites establecidos a medida que descubren la posición que les corresponde en casa. Ahora es el momento de mantenernos firmes, pero también de ofrecerles mucha seguridad. A los seis meses de edad, tu cachorro debería sentirse seguro con respecto a su lugar en la familia y acostumbrarse a su posición.

Madurez sexual: Aunque puede variar ligeramente en función de la raza, por lo general los cachorros alcanzan su versión de la pubertad en torno a los seis meses. Las hembras presentan síntomas físicos similares a la menstruación humana. En esta etapa, es posible que los cachorros macho marquen su territorio, intenten escabullirse de casa y montar prácticamente todo lo que se les ponga por delante, según el American Kennel Club. Castrar o esterilizar a tu cachorro es la mejor manera de evitar un embarazo no deseado y reducir el mal comportamiento.

Conocer el significado de determinada conducta del cachorro y aprender a interpretar su lenguaje corporal son habilidades importantes para todo propietario. Dichas habilidades no solo te ayudarán a afianzar el vínculo con tu cachorro, sino que además te permiten satisfacer mejor sus necesidades emocionales, para que, al crecer, puedan convertirse en un perro emocionalmente bien adaptado.

Contributor Bio

Jean Marie Bauhaus

Jean Marie Bauhaus

 

Jean Marie Bauhaus es propietaria de varias mascotas, tiene un blog sobre ellas y es novelista. Desde su casa en Tulsa (Oklahoma), escribe novelas a menudo con la ayuda de sus amigos peludos.

 

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