¿Por qué los labradores siempre tienen hambre? La ciencia detrás de la saciedad

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Encuentre alimentos que se ajusten a las necesidades de su mascota

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Hace tiempo que se dice que los labradores siempre tienen hambre y que parecen pozos sin fondo en lo que se refiere al alimento. A algunas razas, como el labrador, les encanta la comida, mientras que otras, como el border collie, están más orientadas a las tareas y a las personas. ¿Por qué los labradores se pasan el tiempo buscando alimento y por qué son más propensos a la obesidad debido a esto?

Hay varias razones que podrían explicar el hambre que parece tener siempre tu labrador. Veamos cuáles pueden ser.

¿La genética de los labradores los hace estar siempre más hambrientos?

Tal y como apunta imveterinaria, en un estudio publicado en la revista Cell Metabolism los investigadores analizaron tres genes relacionados con la obesidad en 310 labradores entre los que se encontraban perros de asistencia, y que fueron pesados por los veterinarios. Los resultados revelaron que una variante de un gen, conocido como POMC, estaba estrechamente relacionada con el peso, la obesidad y el apetito en los labradores. Según el trabajo, al menos uno de cada cuatro labradores (el 23%) portaba una copia de esta variante. Esta mutación genética afecta a su motivación por el alimento, aumenta la probabilidad de acumular grasa y les hace más propensos a la obesidad. El estudio también descubrió que esta mutación era más frecuente en los perros que se seleccionaban como perros guía que en los que se convertían en mascotas.

El gen POMC, que es el gen afectado, también está relacionado con la obesidad en humanos e interviene en la saciedad. Saciedad significa sentirse lleno. Parece que la mutación de los labradores hace que no se den cuenta de cuándo están llenos, por lo que nunca se sienten saciados y siguen buscando alimento.

Otras causas de hambre que debes descartar

Si tienes un perro que parece hambriento constantemente, puede que no sean solo sus genes. Ante esos ojos suplicantes, es muy difícil no ceder, pero puede acabar convirtiéndose en un círculo vicioso y muy poco saludable. Los perros que tienen sobrepeso cuando son cachorros se convierten en adultos con sobrepeso y pueden tener tendencia a la obesidad de por vida. Con esto en mente, si tienes un labrador, es conveniente que muestres disciplina desde el principio en lo que se refiere al alimento y al comportamiento a la hora de comer.

Consulta con tu veterinario sobre la puntuación de la condición corporal (PCC). Así te aseguras de que tu perro tiene el peso ideal para su tamaño, raza y edad. Lograr que se mantenga delgado durante toda la vida tiene muchos beneficios para la salud.

Evita malos hábitos alimentarios con tu perro

Adquiere buenos hábitos en lo que se refiere a tus alimentos. Los perros a los que se permite rebuscar llegan a convertirse en una verdadera molestia a la hora de comer, y este hábito acaba siendo difícil de eliminar una vez arraigado. Quizá parezcan hambrientos, pero solo están actuando porque saben que funciona. Asegúrate de que todos los miembros de la familia, incluidas las visitas, sepan que no está permitido dar de comer al perro desde la mesa.

Pesa la ración de tu perro para no tener que adivinarla. Si tu labrador, o cualquier otro perro, parece tener hambre durante el día, divide la ración diaria en tres o cuatro comidas. Si esto no ayuda, habla con tu veterinario para determinar si sería apropiado utilizar un alimento más saciante y bajo en calorías para ayudar con la sensación de hambre.

Parásitos en perros

Asegúrate de que el tratamiento desparasitante de tu perro está al día. Aunque las infestaciones graves de lombrices no son muy frecuentes hoy en día, no dejan de ser un problema, sobre todo si tu pequeño glotón come todo tipo de cosas desagradables cuando sale a pasear. La diferencia es que los perros que tienen hambre a causa de las lombrices no engordan, e incluso pueden adelgazar.

Problemas médicos

Los labradores son más propensos a ciertas enfermedades, lo que también puede hacer que la obesidad sea un problema mayor. Los problemas de codo y cadera son bastante comunes en esta raza, y si tu perro no puede hacer ejercicio necesitará menos calorías. Con problemas ortopédicos, es especialmente importante mantenerlos delgados para reducir al mínimo la tensión sobre sus articulaciones.

Los labradores también son propensos al hipotiroidismo, que es una glándula tiroides hipoactiva. La tiroides controla el metabolismo, por lo que los perros afectados tienden a sentirse letárgicos, hambrientos y son propensos a ganar peso con facilidad. Si tu veterinario sospecha que hay hipotiroidismo, tendrá que hacer determinados análisis de sangre para confirmarlo o descartarlo.

En resumen

Aunque tu labrador tenga una excusa genética para ser un glotón, sigue siendo muy importante que vigiles su peso. La obesidad es muy mala para la salud de tu perro y está demostrado que acorta su esperanza de vida. Para pasar el máximo tiempo con tu mascota, ¡mantente fuerte y no cedas ante esos ojos suplicantes y hambrientos!

Revisado por el Dr. Hein Meyer (doctor en Medicina Veterinaria, doctorado, diploma ECVIM-CA)