Problemas urinarios en gatos: detectar los signos y las causas

Publicado por
minutos de lectura

Encuentre alimentos que se ajusten a las necesidades de su mascota

Encuentre alimentos que se ajusten a las necesidades de su mascota

Encuentre alimentos que se ajusten a las necesidades de su mascota

Los problemas urinarios de los gatos son un motivo frecuente de visita a la clínica veterinaria. Hay bastantes causas posibles de problemas urinarios en gatos, pero la más frecuente con diferencia es el estrés. Aunque parezca que los gatos tienen una vida fácil, pueden estresarse con mucha facilidad, sobre todo si siempre están encerrados en casa o conviven con otros gatos. Además de los problemas urinarios, el estrés crónico también puede provocar trastornos gastrointestinales, un aseo excesivo y problemas de comportamiento. Como los problemas urinarios pueden ser uno de los signos más tempranos y evidentes de que tu gato sufre algún tipo de estrés, es importante que los propietarios sepan cómo son los síntomas y cómo pueden ayudar a sus compañeros de cuatro patas.

¿Cómo sé si mi gato tiene un problema urinario?

Cuando los gatos se sienten sanos y felices, utilizan el arenero o salen al exterior para orinar y defecar. Sin embargo, si tu gato empieza a mostrar alguno de los siguientes comportamientos, puede tener problemas de vejiga o la enfermedad del tracto urinario inferior (FLUTD):

  • Dificultad para orinar
  • Incontinencia/pérdida de control de la vejiga
  • Orinar fuera de su arenero o en la casa cuando suele salir fuera
  • Gemidos y maullidos de dolor al orinar o al intentar orinar
  • Lamido de la zona genital
  • Reducción del apetito

Cuando el FLUTD se debe al estrés, se suele denominar cistitis por estrés. La mayoría de los gatos mostrarán los signos anteriores cuando hayan alcanzado su límite de estrés o tengan un problema médico, por lo que algunos signos tempranos de estrés podrían ser que tu gato se esconda más, sea menos cariñoso, haya cambiado su comportamiento alimentario o solo orine o defeque en el arenero (cuando antes hacía ambas cosas). Sin embargo, algunos gatos pueden mostrar signos de problemas urinarios y cistitis por estrés sin previo aviso. En cuanto un gato muestre signos de problemas urinarios, es importante llamar al veterinario. Estos casos deben ser examinados siempre por un profesional. Si la uretra de tu gato se obstruye, algo más frecuente en los gatos machos, se trata de una urgencia médica, ya que se podría producir una rotura de la vejiga o un fallo renal si no se trata.

Detectar los factores de estrés

Si tu gato muestra un comportamiento inusual al orinar o lo hace constantemente fuera de su arenero, es importante identificar cualquier factor estresante que pueda estar experimentando. Cuando llames al veterinario para explicarle los síntomas de tu gato, es posible que te haga algunas preguntas para averiguar qué le está estresando, como por ejemplo:

  • ¿Tienes otros gatos en casa?
  • ¿Tiene tu gato acceso al exterior?
  • ¿Cuándo empezaron los problemas urinarios?
  • ¿Has hecho algún cambio reciente en su alimentación o en su arenero?
  • ¿Qué otros comportamientos inusuales acompañan a los problemas urinarios?
  • ¿Se han producido grandes cambios en tu hogar, como una remodelación, una nueva mascota (la llegada de un gato, por ejemplo), un bebé o una muerte en la familia?

También hay que tener en cuenta que los gatos suelen estar en sintonía con los sentimientos de sus propietarios, así que quizá también debas reflexionar un poco sobre tu propia situación. ¿Tú has sentido estrés últimamente? ¿El estrés ha empezado a interrumpir tu rutina diaria? Es probable que si tu rutina diaria se ha interrumpido, también lo haya hecho la de tu gato. La falta o el exceso de sueño son síntomas comunes en las personas con estrés. Cuando un gato nota estos cambios, puede empezar a estresarse y los síntomas podrían manifestarse en su comportamiento urinario.

 

Estrés a corto plazo frente a estrés a largo plazo

Los grandes cambios en la vida de un gato, como una mudanza o la llegada de una nueva mascota a la casa, pueden causarle estrés de forma temporal. Aunque muchos gatos se adaptan en un plazo de tiempo razonable, algunos permanecen estresados, lo que puede provocar problemas urinarios como un aseo excesivo o problemas gastrointestinales, entre otros. Los problemas urinarios pueden remitir rápidamente si el factor estresante se identifica con rapidez y puede resolverse.

Las fuentes de estrés más difíciles son las situaciones a largo plazo que no tienen solución rápida y pueden causar problemas urinarios más graves. Las causas más frecuentes de estrés en los gatos son, con diferencia, la convivencia con otros gatos y el hecho de permanecer exclusivamente dentro de casa. Para muchos gatos, ambas cosas son una realidad.

Cómo tratar y prevenir los problemas urinarios en gatos

Si tu gato sufre estrés, es necesario que acudas al veterinario. Dependiendo de la gravedad de los problemas de vejiga de tu gato, el veterinario puede recetarle medicación y/o ajustar la dieta con un alimento terapéutico, lo que puede ayudar a aliviar algunos problemas urinarios y hacer que vuelva a sentirse bien. Algunas de estas dietas terapéuticas también contienen ingredientes naturales que ayudan a reducir el estrés. Además de la medicación y la alimentación, tu veterinario también puede ofrecerte sugerencias sobre cómo mejorar tu hogar para calmar a todos los gatos de la casa. Si tienes varios gatos, debes tener un comedero y un bebedero más que el número de gatos que tengas, y debes distribuirlos por la casa para que un gato no tenga que estar cerca de otro para comer y beber. Lo mismo ocurre con los areneros, aunque deben colocarse lejos de los comederos y bebederos.

A veces basta con pasar un poco más de tiempo con tu gato y prestarle atención positiva. Además, procura mantener el arenero y la casa muy limpios y asegúrate de que tu gato está bien hidratado, ya que esto puede aliviar el estrés y reducir o eliminar los problemas urinarios felinos. Por desgracia, para muchos gatos, la cistitis por estrés puede tardar semanas o meses en aliviarse. También puede aparecer y desaparecer, por lo que a veces puedes pensar que la situación se ha resuelto, pero no es así. A menudo se debe a una fuente inesperada de estrés, como obras de reforma en casa o muchas visitas durante las vacaciones. Si eres capaz de anticiparte a estos acontecimientos, podrás trabajar con tu veterinario para reducir el impacto en la medida de lo posible.

Una vez que identifiques la causa del estrés urinario y encuentres la forma de reducir el nivel de estrés, es importante que le ayudes a gestionarlo adecuadamente en el futuro. ¡No olvides gestionar también tu propio estrés! Otro factor importante para controlar el estrés de tu gato es la constancia. Si sabes que tu rutina va a cambiar pronto o se avecina un gran cambio en tu vida (una mudanza, la llegada de alguien nuevo o de un animal a la casa, etc.), intenta preparar a tu gato encontrando objetos y juguetes que le gusten. Un poco de cariño extra le ayudará a sentirse más seguro e incluso puede distraerle de los cambios que se avecinan. Además, mantén su arenero muy limpio y busca un lugar tranquilo para que se relaje. Utilizar dispositivos como difusores de feromonas en el momento de acontecimientos potencialmente estresantes también puede ser muy útil para algunos gatos.

Si nos preparamos para las situaciones estresantes y estamos atentos a los primeros síntomas de agobio, podemos ayudar a nuestro gato a evitar problemas urinarios y a llevar una vida más sana y feliz.

Revisado por el Dr. Hein Meyer (doctor en Medicina Veterinaria, doctorado, diploma ECVIM-CA) y la Dra. Emma Milne (graduada en Ciencias Veterinarias, miembro del Real Colegio de Veterinarios del Reino Unido).

Información acerca de la colaboradora

Chrissie Klinger

Chrissie Klinger

 

Chrissie Klinger, madre de dos hijos y propietaria de tres perros y un gato, disfruta escribiendo artículos relacionados con las mascotas que ayudan a las familias a establecer vínculos afectivos y a disfrutar de la vida con ellas. Cuando no está enseñando o escribiendo, le gusta pasar tiempo con su familia y viajar.