Encuentre alimentos que se ajusten a las necesidades de su mascota
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Las tiroides son dos glándulas muy pequeñas que se ubican a ambos lados de la tráquea de tu gato. Estas glándulas utilizan el yodo de la dieta para producir hormonas tiroideas. A su vez, estas hormonas ayudan a regular importantes funciones corporales. Puedes imaginarte las glándulas tiroideas como el horno de carbón de un tren de vapor. Cuando se necesita más calor o velocidad, el metabolismo se acelera, como si se echara carbón al horno. Las hormonas tiroideas ayudan a regular:
- El metabolismo
- La temperatura corporal
- La presión arterial
- La frecuencia cardiaca
- La función gastrointestinal (intestino)

¿Qué es el hipertiroidismo en gatos?
El hipertiroidismo es una enfermedad endocrina común que suele diagnosticarse en gatos de más de 10 años. Por lo general, es el resultado de un tumor benigno (también llamado hiperplasia) en una o ambas glándulas. Estos tumores producen un exceso de hormonas tiroideas y el metabolismo entra en modo de máxima actividad.
Si no se trata, el hipertiroidismo puede tener consecuencias graves, a veces mortales, en órganos vitales como el corazón y los riñones. Sin embargo, la buena noticia es que esta enfermedad es fácil de tratar y puede controlarse con los cuidados veterinarios adecuados.
Síntomas y señales de alerta del hipertiroidismo en gatos
Los signos del hipertiroidismo pueden variar en gravedad en función del tiempo que el gato lleve enfermo. Como el metabolismo se acelera por todas estas hormonas adicionales, los signos y síntomas más comunes son:
- Pérdida de peso
- Aumento del apetito
- Diarrea y/o vómitos
- Aumento de la sed
- Deterioro de la piel y el pelo
- Hiperactividad
- Aumento de la vocalización
Los gatos con enfermedad renal crónica y diabetes presentan algunos signos similares al hipertiroidismo. Tu veterinario también podría realizar pruebas para detectar estas enfermedades con el fin de garantizar un diagnóstico preciso. Además, en los gatos de edad avanzada, no es raro que una o varias de estas enfermedades estén presentes al mismo tiempo.
Tratamientos para gatos con hipertiroidismo
Existen cuatro opciones potenciales para manejar el hipertiroidismo en gatos:
Nutrición. Limitar la ingesta diaria de yodo reduce la producción de hormonas tiroideas. Este alimento terapéutico contiene todo el yodo que necesita un gato adulto, pero no lo suficiente para permitir una sobreproducción de la hormona.
Pros:
- No es necesario medicar a tu gato. La alimentación de tu gato es necesaria de todos modos, así que usarla como opción es una buena idea.
- Sin efectos secundarios.
- No es necesario hospitalizar a tu gato.
Contras:
- Algunos gatos pueden ser demasiado exigentes con la alimentación. Si tu gato suele comer en otros lugares, es posible que el alimento no funcione.
Medicación. Los fármacos antitiroideos inhiben la producción de hormonas tiroideas.
Pros:
- No es necesaria la hospitalización.
- Los fármacos son efectivos.
Contras:
- Algunos gatos son difíciles de medicar.
- Estos fármacos pueden tener efectos secundarios importantes en algunos gatos, como picor facial intenso, lesiones cutáneas, síntomas gastrointestinales, anemia y otros cambios sanguíneos de moderados a graves.
Terapia con yodo radiactivo. Consiste en utilizar la radioterapia para destruir el tejido tiroideo anormal.
Pros:
- La radioterapia es efectiva.
- Por lo general, no es necesario medicar a largo plazo.
Contras:
- Costes.
- Son pocos los centros que ofrecen este tratamiento, por lo que es posible que tu gato tenga que trasladarse.
- Es probable que estos centros te pidan que tu gato permanezca con ellos durante algún tiempo después del tratamiento. Sin embargo, esto es lo mejor para tu gato y para tu hogar. El material radiactivo utilizado para el tratamiento llega rápidamente a la orina y heces de tu gato, por lo que será necesario eliminar de forma segura dicho material antes de que el animal pueda regresar a casa contigo.
Cirugía. Consiste en extirpar el tejido tiroideo enfermo.
Pros:
- Tratamiento curativo. Si se trata de un tumor maligno (lo cual es poco frecuente), la medicación y la alimentación no lo curarán, pero la cirugía sí, en caso de que el tumor no se haya extendido todavía.
Contras:
- Riesgos normales asociados a la cirugía y la anestesia, especialmente en gatos mayores.
- Tu gato tendrá que estar hospitalizado uno o dos días, lo que puede ser estresante.
- Complicaciones ocasionales si se dañan las glándulas paratiroides cercanas. Esto puede provocar problemas con el metabolismo del calcio que pueden ser graves.
No hay una opción adecuada para todos los gatos. Con todas estas opciones, tendrás que hacer un seguimiento a largo plazo de los niveles tiroideos y de la función renal mediante análisis de sangre periódicos. Como puedes ver, cada opción tiene sus pros y sus contras, así que habla con tu veterinario y ten en cuenta tu estilo de vida y el de tu gato. Juntos podréis elegir la opción adecuada para ambos.
Revisado por el Dr. Hein Meyer (doctor en Medicina Veterinaria, doctorado, diploma ECVIM-CA) y la Dra. Emma Milne (graduada en Ciencias Veterinarias, miembro del Real Colegio de Veterinarios del Reino Unido).